Roberto Gómez Bolaños, más conocido como “Chespirito”, fue un famoso actor y escritor de México. Él murió en 2014, pero dejó un gran impacto en la televisión y el teatro. Chespirito se casó dos veces y tuvo seis hijos con su primera esposa, Graciela Fernández Pierre. Estos niños nacieron en los años 60, excepto la más grande que nació en 1959.
Después de divorciarse, Chespirito se casó con Florinda Meza en 2004. No tuvieron hijos juntos porque Chespirito había decidido no tener más hijos después de una operación llamada vasectomía.
De sus hijos, solo su hijo Roberto Gómez Fernández ha seguido trabajando en el mundo del espectáculo. Él ahora produce una serie sobre la vida de su padre llamada ‘Sin querer queriendo’. Esta serie cuenta sobre la vida personal y profesional de Chespirito.
Chespirito tuvo muchos nietos, 12 en total. Sin embargo, solo dos de ellos, María y Andrés Penella, han decidido seguir los pasos de su abuelo en el entretenimiento.
María Penella, que ahora tiene 28 años, ha trabajado en teatro, televisión y cine desde que era muy joven. Ha actuado en obras como ‘El diario de Ana Frank’ y ‘El hombre de la Mancha’. Además, comenzó a actuar en televisión en 2016 con una novela llamada ‘El hotel de los secretos’. María ha destacado en otros proyectos y siempre intenta hacer su propio camino en el mundo del entretenimiento, a pesar de ser parte de una familia muy conocida.
Por otro lado, su hermano Andrés ha decidido ser compositor de música. Ha creado música para diferentes series de televisión, mostrando su habilidad para escribir canciones. Aunque no es tan conocido como otros miembros de su familia, Andrés trabaja seriamente en su arte y prefiere mantener un perfil bajo.
Su madre, Marcela Gómez Fernández, también ha trabajado detrás de cámaras en la televisión, pero como su hijo, ella no busca mucha atención y prefiere vivir fuera del foco público. Aun así, ha estado involucrada en homenajes a su padre y mantiene una relación cercana con su familia.
En resumen, aunque muchos nietos de Chespirito no han seguido en el entretenimiento, María y Andrés han tomado el desafío de hacerse un nombre por sí mismos en este campo, honrando el legado de su abuelo mientras buscan su propio éxito y estilo personal.
